Cervecero casero. Agustín Fernández Checa se ha proclamado ganador del IV Certamen Homebrewing de Cervezas 1906 que cada año reta a decenas de cerveceros de toda España. Agustín elabora sus cervezas en un local de su casa en La Lastra.
La elaboración de cerveza casera es una de las principales aficiones de este policía municipal de Madrid nacido en Puertollano, que hace 22 años sufrió un accidente de tráfico que le provocó una lesión medular por la que está en silla de ruedas. Agustín estaba casado con una leonesa y tras el accidente y el nacimiento de sus hijos mellizos decidieron trasladarse a León. «Queríamos criar a nuestros hijos en un ambiente menos estresante que en Madrid y mi mujer pidió una excedencia de tres años y ya nos quedamos aquí».
Además de mantenerse en activo con el deporte y múltiples aficiones, en el año 2011 cayó en sus manos un artículo en el que se abordaba la elaboración casera de cerveza. «Me llamó la atención. Yo no he tenido nunca una especial predilección por la cerveza, pero me animé». Y su determinación contagió a un amigo que en ese momento estaba en ERE en Antibióticos y con el que inició el proceso de elaboración. «Nos pusimos a hacer cerveza, a probar, sin los conocimientos que ahora tengo. He aprendido bastante».
En un pequeño local junto a la cochera de su casa, Agustín sigue ahora en solitario y prueba distintos procesos para elaborar cervezas que se ajusten a sus gustos y a un producto de más calidad. En todo este tiempo se ha formado en cursos online. «He aprendido mucho de todo el proceso», asegura, y ese conocimiento le empieza a dar los primeros resultados. El IV Certamen Homebrewing de Cervezas 1906, celebrado en el mes de mayo en el Museo de Estrella Galicia, es el primer concurso que gana y el segundo en el que participa.
Próximos concursos
«Tengo en maduración una cerveza para un concurso, se llama Pantocrátor San Isidoro, en honor a León, es una cerveza del estilo doppelbock, una cerveza más fuerte de lo normal, de 7,5º, tostada, en la que se distinguen los sabores a pan, nueces y pastas, un poco afrutada en la que se distingue el alcohol caliente al entrar. Como es fuerte hay que tomarla con guisos contundentes y carnes. Es muy apreciada por los cerveceros caseros. Se utilizan levaduras alemanas».
Esta cerveza competirá contra otras muchas en el siguiente concurso de cerveceros caseros al que tiene previsto presentarse. “En todos los años que llevos elaborando cervezas caseras, solo una salió con un defecto de olor. Fue directa al fregadero”.
En el pequeño local preparado para esta afición ha elaborado ya una decena de cervezas de estilos diferentes. «No puedo manejarme con grandes pesos por lo que la producción es muy limitada». Como mucho, fermenta 17 litros para llenar 45 botellas para consumo propio y regalar a sus amigos.