No es Bodega Cuatro Rayas amiga del conformismo. Aunque sí lo es de la tradición, trata a menudo de conjugarla con la innovación. Fruto de este ánimo es su última elaboración, Cuatro Rayas Grape Lager, una cerveza única, inédita en el mercado, que parte de la colaboración con Milana Brewing y muestra su sensibilidad con una manera artesanal de hacer las cosas, muy de la tierra que pisa, pero sin dejar de explorar nuevos formatos. En esta conjugación de creatividad y tradición, juega con el uso de la uva blanca verdeja, que le da un sabor singular.
«Las cervezas hechas con mosto de uva ya existían, pero no una cerveza ‘lager’ hecha con la uva verdeja del corazón de La Seca. Es una uva que mejora cualquier bebida con la que se pueda mezclar y que hace que estemos ante una cerveza singular», indica Roberto L. Tello, enólogo y Brand ambassador de Bodega Cuatro Rayas, que ha generado sinergias con la cervecera vallisoletana Milana Brewing. «Son un compañero de viaje que entiende perfectamente lo que es una cerveza de calidad, artesana y vinculada a los pueblos de Castilla y León. Como hacemos en Cuatro Rayas, creen en el producto local y en la defensa del ámbito rural», desarrolla el enólogo
Fruto de esta concurrencia entre la cervecera de Montemayor de Pililla y la bodega de La Seca ha nacido un producto que marida lo mejor de la tradición vinícola y la pasión por la certeza artesanal con enfoque en la sostenibilidad. «Nuestra forma de hacer las cosas parte del respeto de las materias primas y busca mantener la identidad de los productos y la singularidad de nuestro territorio», alega Roberto L. Tello sobre Cuatro Rayas Grape Lager, que define como una propuesta «completamente original dentro del panorama cervecero», ya que «combina el mosto de uva blanca verdeja, recogida durante vendimias nocturnas con el mosto de malta de cebada para obtener una fusión perfecta».
Tal y como reconoce el enólogo y Brand ambassador de Bodega Cuatro Rayas, la Grape Lager «es una cerveza más de las que se pueden consumir en cualquier local, pero tiene una gran calidad; es 100% malta, y a eso le une el mejor mosto de uva verdeja», un 10% que supone un equilibrio ideal que le da «un matiz especial y único». «Cuando la prueban, las personas saben que están bebiendo una cerveza, pero perciben que tiene una pequeña pincelada y unos aromas frutales que recuerdan a la uva».